jueves, 4 de febrero de 2010

UNA PIEZA DE JAZZ (nocturno)

Fluía seductora por el aire
una ardiente y desnuda melodía,
la luz tenue y árida se hilaba
temblorosa entre láminas y tapices
que encubrían el espíritu del antro.
Sombreaba los perfiles de las notas,
un humo ondulado y soñoliento mientras
una voz grave y rajada de mujer
rompía la tibia brisa del ambiente.
Canto y música se anudaban armoniosos
entre el halo apasionado de la atmósfera,
y mis manos se deslizaban trepidantes
buscando la tersura de tus senos.
El piano, con sus ritmos sutiles,
buscaba entre lo oscuro la luz
donde filtrar sus tonos afilados,
mientras mi mente recorría
los abismos misteriosos de tus ingles.
Una pieza de Jazz se escapaba
del malva aureola de unos labios
y nosotros, sumidos entre pasiones,
hurgábamos silenciosos en el pecado.

©Adolfo Caballero Guirado
Nota: La imagen fue tomada de Internet.